El pasado 13 de mayo, los grupos de trabajo “Psicología y Adicciones” y “Psicología y Artes Audiovisuales y Escénicas” del Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid, aunaron sus esfuerzos para organizar conjuntamente un cineforum abierto al público, acerca de un fenómeno oculto en nuestra sociedad y que, sin embargo, genera un intenso sufrimiento a quienes lo padecen: la adicción al sexo.

Con el fin de poder abordar esta cuestión, se proyectó en el salón de actos de dicho colegio profesional, la película de Stuart Blumberg, “Amor sin control”, que narra en clave de comedia, las vicisitudes de diversos adictos al sexo, que coinciden en un centro de “desintoxicación” en EEUU.Presentaron el acto las coordinadoras de ambos grupos de trabajo, las psicólogas, Mª Sol de Ena –adicciones- y Ana M. Fernández,-audiovisuales-. A continuación de la proyección, el psicólogo Sergio García, de audiovisuales, encuadró el momento y las circunstancias del estreno de la cinta en nuestro país, y resaltó algunos de los recursos cinematográficos utilizados para captar la atención del espectador. Se hace una especial mención a la desafortunada traducción del título al español, (en el original, “Gracias por compartir”), que al incluir la palabra “amor”, genera aún mayor confusión en un tema ya de por sí, controvertido y encubierto como la adicción al sexo. Por su parte, las psicólogas del grupo de adicciones, y Sol de Ena y Ana de la Ossa, desde su dilatada experiencia profesional con adictos de diversa consideración, definieron las características generales de la adicción, remarcando los componentes de pérdida de control y aparición del síndrome de abstinencia, e hicieron mención a las definiciones contempladas por el manual diagnóstico de trastornos mentales, en sus diferentes revisiones, que en relación al caso concreto del sexo, aparece representado con el nombre de hipersexualidad.A partir de estas introducciones, se abrió el coloquio con el público, cuyas preguntas y comentarios dieron lugar a interesantes reflexiones y aclaraciones, entre las que destacamos las siguientes: las diferencias y semejanzas entre las adicciones y los comportamientos obsesivos y compulsivos; la falta de datos estadísticos en nuestro país sobre las adicciones sexuales; el estigma que supone para el adicto reconocer su problema y los síntomas que acompañan su adicción tales como la impulsividad inicial y los rasgos depresivos posteriores; el sufrimiento intenso que caracteriza a quien padece la adicción; las diversas conductas con que puede manifestarse este problema, tales como masturbación compulsiva, consumo excesivo de pornografía y prostitución, abuso de líneas eróticas, abusos, acosos y agresiones sexuales, sexo anónimo y/o con muchas personas, etc…

También se explicitó el tratamiento elegido en la película para los sexoadictos, basado según la sinopsis en los 12 pasos de Minessotta para alcohólicos. Sin embargo, en la cinta, se refleja sobre todo un tratamiento centrado en evitar la conducta problema, y apoyándose para ello en tutores en proceso de rehabilitación. En este sentido, se destacó la labor del psicólogo, ausente en la película, una de cuyas funciones más importantes, será ayudar al paciente a conseguir la integración de aquellas partes de sí mismo que no acepta, algo fundamental para que haya un auténtico cambio a largo plazo.

Autora: Ana M. Fernández Rodríguez. Coordinadora del GT Psicología y Artes Audiovisuales y Escénicas (PSICOARTAES)